martes, 22 de abril de 2008

LOS TÉCNICOS PIDEN QUE SE RETIRE A LOS MENORES DE LOS JUICIOS

El 26 de marzo España desayunaba con la noticia de la detención de Santiago del Valle y el 27 empezaba a conocer la cadena de errores judiciales que permitían seguir libre a un pederasta de contrastada peligrosidad. Ese mismo día, Benjamín Lora, un maestro que abusó de siete alumnas en El Puerto de Santa María (Cádiz), aceptaba una condena de cuatro años y medio en lugar de los 21 que pedía el fiscal. La razón de esa rebaja fue un acuerdo entre las partes para evitar a las menores, de ocho y nueve años, el mal trago de declarar en el juicio.

El problema de una "segunda victimización del menor", al tener que prestar declaración, incluso varias veces, está aún pendiente de resolver, advierten diversos colectivos en defensa de la infancia. También alertan de que, en ocasiones, los padres prefieren no denunciar para que sus hijos no sufran un proceso judicial. Por ello, algunos pederastas siguen en libertad o ven reducir sus penas sustancialmente.

Privilegio de los ministros

Para prevenir esta irregularidad, las asociaciones piden cambios a la Fiscalía General del Estado. Mañana una comisión constituida por tres fiscalas y creada a raíz del caso de Mariluz celebra su segunda reunión para evitar fallos en casos de delitos sexuales.

La asociación Pro Derechos del Niño (PRODENI) lamenta que hasta ahora la Justicia sólo haya puesto "parches" para proteger los derechos del menor, como que declare tras un biombo o una mampara .

Su portavoz, José Luis Calvo, exige que tengan el mismo estatus que un ministro: "Que declaren una sola vez y no físicamente en los juzgados". En general, demanda "simplificar al máximo el procedimiento" y pide informatizar el sistema y dar formación a los funcionarios judiciales para mejorar el trato a los menores.

La Asociación para la Sanación y Prevención de los Abusos Sexuales en la Infancia (ASPASI) se opone a obligar a los niños a declarar en presencia de sus agresores. "Aumentará su temor, se sentirán todavía más presionados y probablemente se contradigan respecto a otras declaraciones. En un 86% de los casos, el agresor es un miembro de la propia familia o una persona del entorno de la víctima", explica su portavoz, Carmen Refuerce.

Además, pueden pasar cerca de dos años entre el primer relato que hicieron los menores al presentar la denuncia y el juicio oral. Por esta razón, ASPASI considera fundamental que declaren una única vez ante el menor número posible de personas, y grabarlo para evitar nuevas declaraciones.

En una línea similar, la abogada y fundadora de la Asociación de Asistencia a Mujeres Agredidas Sexualmente, María José Varela, reclama que sea obligatoria la grabación de una única declaración. Para que sea "legal", cree necesario que se realice ante expertos (psicólogos, psiquiatras) y "en una sala con un espejo unidireccional tras el que estén el juez, el fiscal y los abogados de la defensa y la acusación".

Testimonios ‘insuficientes'

Actualmente, no siempre es válida una declaración así, puesto que se dan casos en los que el juez no la cree suficiente y vuelve a llamar al menor. A veces, el condenado recurre la sentencia y se le absuelve porque el niño no declaró en el juicio, lamenta Varela.

El portavoz de Jueces para la Democracia, Jaime Tapia, reconoce que "eventualmente" se graban las declaraciones de los niños en audio y sólo en "pequeñas experiencias" se han recogido sus testimonios en video. "En la práctica, es muy habitual que declare ante el juez, la policía, el médico forense, los psicólogos e, incluso, en el juicio oral", afirma. Aun así, asegura que en los últimos años los jueces son más sensibles en estos casos.



PÚBLICO.ES ESPAÑA

SILENCIO...

Silencio del abusador que comete abuso sexual infantil

El abusador MIENTE manifestando que él no cometió el abuso. Impone silencio al abusado por medios coercitivos y seductores. Crea un ámbito donde se establece un vínculo afectivo y de confianza que evita la revelación de las conductas abusivas.El secreto impone un modo de comunicación donde se establecen ciertos códigos y reinterpretaciones de la realidad creados por el abuso. El abusador guarda “silencio – secreto” que es compartido con el abusado, por varios motivos: a) en el conocimiento de que sus actos son delictivos; b) en el saber que si se revela el abuso, no podrá continuar con el mismo; c) porque el abuso es sintónico con su yo; d) por lo anteriormente dicho, no tiene sentimiento de culpa. El abusador usa a la niña o al niño como objeto sexual e inclusive le amenaza con aniquilarlo si se resiste o revela lo vivido. No le importa lo que la niña o el niño siente en tanto persona. El secreto compartido con el abusado le permite al abusador, tener poder y control sobre el espacio personal de la víctima y con eso evita así la divulgación del abuso. El abusador sexual transgrede la ley social y comete delito y él lo sabe, por eso silencia su acto delictivo.



El silencio en las niñas y niños abusados

El silencio – en forma genérica - hace a la privacidad de la persona y protege lo que es íntimo y personal. En la experiencia del secreto – en el desarrollo normal - el niño descubre algo nuevo: la interioridad, la privacidad. Y este espacio interno, íntimo juega a su favor puesto que el hecho de que pueda esconder ciertos sentimientos es un signo de crecimiento, crecimiento hacia su independencian en su subjetividad. Pero es el propio niño el que escoge no contar algo, en este tipo de secreto. Pero en el abuso sexual infantil se encuentra la obligación del secreto.No es habitual que los niños relaten el abuso a que están sometidos y muchas veces pasan años, antes de que puedan romper el silencio y siempre que hay un abuso, es de la índole de lo incestuoso (vinculos familiares) y se trata de vínculo de confianza. Esto sucede porque se da en un largo lapso de tiempo y con un vínculo afectivo intenso con el abusador. El niño o la niña se ven involucrados en actividades que no comprenden. El abusador le impone al niño al silencio sobre el abuso, silencio que es un secreto compartido con el abusador en donde la niña es obligada a no contar, a callar, por imposición de quien ejerce dominio sobre ella y muchas veces con amenazas de daño hacia los familiares, si hablase del abuso. En otros casos, el silencio proviene de un no hablar porque se trata de algo que es innombrable y que son vivencias, percepciones sin representaciones, que de tan terrible que es logra que la mente sea incapaz de poderlo representar. En otros procesos los niños no hablan porque no confían en que puedan ser entendidos ni ayudados ( desvalimiento). En otras situaciones funcionan escindidos, divididos: saben pero no saben, utilizando el mecanismo psíquico de sobvrevivencia, al igual que las personas que son torturadas por un torturador. La niña calla además por angustia que la confunde al no entender que aquella misma persona que la cuida, también le ocasiona dolor; puede reconocer en forma paulatina lo impropio del contacto y sentir vergüenza por ello. El niño abusado está frente a una disyuntiva: o se identifica con el abusador que le arremete o acepta el abuso en sometimiento debiendo entregar – por decirlo de alguna manera – su capacidad de pensar. Cuando la niña logra hablar en su especial lenguaje y no se le entiende o no se le cree, dice que lo que pasó no ha pasado: se retracta. Al retractarse, queda nuevamente en silencio, no hablando por la desconfianza que les generan las personas que deberían haberla protegido: queda nuevamente indefensa...Escuchemos a las niñas, niños y adolescentes cuando dicen aquello que les pasa. Es una primera forma de ayuda, para comenzar acciones en contra del abuso sexual infantil.

EL ASESINO DE MARILUZ





Fuentes judiciales han explicado hoy que el sospechoso S.V.G. tenía pendiente de cumplir la condena de dos años y 9 meses de cárcel que le impuso en 2002 el juzgado penal 1 de Sevilla por el abuso sexual de su hija de 5 años, pena que aún no se había podido ejecutar porque el acusado estaba en paradero desconocido.

Además, según otra sentencia facilitada hoy, S.V.G. fue condenado en diciembre de 2004 por el juzgado penal 4 de Sevilla a dos años de cárcel por abusar sexualmente de una niña de 9 años, a la que sorprendió en la escalera de su vivienda.

En este caso, los abusos ocurrieron el 19 de julio de 2003, cuando el acusado siguió a la niña cuando entró en el portal de su casa, la arrinconó en los bajos y allí le hizo tocamientos libidinosos en el trasero y le besó en las mejillas.

El acusado -que reconoció los hechos y aceptó la condena de dos años de cárcel- desistió de su actitud cuando entró otra vecina en el portal.

Concluye la sentencia que la niña se quedó llorando, mientras que S.V.G. "se dio a la fuga tranquilamente", tras apoderarse de las bolsas de la compra que antes portaba la menor.

Esta sentencia se une a la que le impuso el juzgado penal 1 de Sevilla en noviembre de 2002, en aquella ocasión por abusos sexuales continuados durante casi un año contra su propia hija, entonces de 5 años.

Según los hechos que dicha sentencia consideró probados, los abusos comenzaron en la primavera de 1998, cuando S.V.G. hizo tocamientos en los genitales a su hija y la obligó a masturbarle, en unos hechos de los que tenía "pleno conocimiento" la madre y también condenada, I.G.R.

Por este hecho, S.V.G. fue condenado a 21 meses de cárcel por abuso sexual y a otro año por falsedad en documento oficial, pues falsificó un supuesto parte médico en el que se acusaba de los abusos al profesor de gimnasia de la niña en el colegio público Almutamid de Sevilla.

Fuentes judiciales han informado a Efe de que el acusado estaba en situación de búsqueda y captura, ya que cuando la condena fue confirmada por la Audiencia provincial abandonó su domicilio y no pudo ser localizado.

En enero de 1999, el padre acudió al Juzgado de Guardia de Sevilla y denunció al profesor de gimnasia por los abusos, lo que luego se demostró falso y le supuso en 2003 una nueva condena por un delito de denuncia falsa.

En este caso, el juez de lo penal 3 le impuso un año de tratamiento psiquiátrico ambulatorio pues le aplicó la eximente completa de trastorno mental, al considerar que presentó la denuncia cuando se encontraba en una descompensación de la esquizofrenia paranoide que sufría y tenía "totalmente anuladas sus facultades cognoscitivas y volitivas".

S.V.G. acudió además a Canal Sur Televisión, que emitió en dos informativos una entrevista con él en la que pedía para su hija una indemnización de diez millones de pesetas (60.100 euros) a la Consejería de Educación de la Junta de Andalucía.

martes, 15 de abril de 2008

EL CABECILLA DE LA RED DE PEDERASTASEl MONTÓ UN CIBERCAFÉ PARA CONTACTAR CON SUS VÍCTIMAS

Según ha podido saber 20 minutos, Álvaro Iglesias G., el informático madrileño detenido en Murcia y que ha confesado haber abusado de un centenar de niños, montó en 2004 un cibercafé en la localidad murciana de Santiago de la Ribera para contactar con niños a los que luego sometía a abusos. Allí grabó tocamientos a niños de entre siete y nueve años a los que convencía para que fueran acompañados de sus hermanos pequeños.
Según las fuentes a las que ha tenido acceso 20 minutos, el Grupo Central de Delitos Tecnológicos que investiga el caso se ha incautado de dos grabaciones de corrupción de menores hechas en el cibercafé de Santiago de la Ribera (Murcia) que montó mientras veraneaba.


Una vez finalizado el verano, el supuesto pederasta, conocido en la red como 'nanysex', cerró el negocio.


Estas instalaciones eran utilizadas por Álvaro Iglesias para contactar con niños menores de nueve años con los que matenía relaciones sexuales. Además, según estas fuentes policiales, convenció a alguno de estos niños para que realizaran tocamientos a sus hermanos pequeños mientras él lo presenciaba.



Por otra parte, el supuesto pedófilo, que se anunciaba en la Red para cuidar niños pequeños, no hizo de canguro en Murcia, aunque nada más llegar a Comisaría confesó haber tenido contactos con al menos un centenar de niños.

Fuentes policiales apuntaron a este periódico que el sospechoso se instaló en la calle San Pedro del centro de Murcia porque sospechaba que le venían siguiendo la pista en Madrid.

Durante veinte días 'Nanysex' fue vigilado.

Los agentes dan por hecho que el pederasta confeso tenía "intenciones futuras" de cometer los mismos delitos en Murcia.

Todavía pueden encontrarse anuncios en Internet de 'nanysex': "I have private movies only 0 a 5 yo you interest? (Tengo vídeos privados sólo de 0 a 5, te interesan?) o "litle baby and todlesr action" (hechos, con bebés y niños pequeños).

El abogado del juzgado nº 7 de Murcia, encargado de defender al supuesto pederasta renunció a hacerlo.

La fachada de la tienda Tunning PC & Visioncam, que Álvaro Iglesias tenía montada en Murcia, amaneció hoy con una pintada en la puerta que dice: Pederastas muertos. Firmado: Un niño".

VIDEO MUY INTERESANTE SOBRE PEDERASTAS


www.Tu.tv

jueves, 10 de abril de 2008

LA POLICÍA DE TEXAS ENCUENTRA A NIÑOS DE SECTA POLIGÁMICA EN UN RANCHO




Autoridades de Texas se paran frente al bus que usaron para trasladar a los niños que encontraron en el rancho. (Foto: Prensa Asociada)



Las autoridades de El Dorado en el estado de Texas le informaron a los medios que han sacado a 52 niños, desde 6 meses hasta 17 años, de un rancho tejano ocupado por seguidores del encarcelado líder de una secta polígama, Warren Jeffs.

Más de 18 niñas fueron puestas en custodia temporal del Estado bajo decreto de una corte, según le dijo a CNN el vocero de Servicios de Protección al Menor, Marleigh Meisner. "Los niños me han dicho que han sido víctimas de abuso físico", añadió.

Aún no se ha hecho ningún arresto, pero las autoridades están en busca de Dale Barlow, de 50 años de edad, de quien sospechan por haberse casado y tenido un hijo con una joven de 16 años.

Warren Jeffs

El líder de la secta de 52 años y "propietario" de una iglesia de más de 10 000 miembros, fue arrestado en UTAH el año pasado y condenado a 10 años de prisión por ser cómplice de violación. Jeffs también tiene 8 cargos en Arizona por violación a una menor, incesto y conspiración.

La iglesia "Jesus Christ of Latter Day Saints" compró el terreno de El Dorado 4 años atrás y construyó el rancho que llamaron "YFZ rancho".

Lo sentimos el video no está subtitulado a español pero puede entenderse más o menos con facilidad. La cara de esta mujer vale más que mil palabras. Cuenta su experiencia en ese rancho: esperamos que os guste.

martes, 8 de abril de 2008

PERO LENTAMENTE...






No ceso de darle vueltas al asunto, lo escuché por la radio: una madre, catalana para más señas, explotaba a su hija, de nueve años, sexualmente, y ello porque, tras la separación, sus condiciones económicas no le permitían vivir. Los que acudían a su casa eran amigos y conocidos suyos, o sea, la muy zorra actuaba en calidad de manager de su hija.
Son historias, dramáticas historias, que ocurren todos los días en el mundo. Justo en este preciso momento muchos niños están siendo sometidos a la vil conducta de pervertidos, algunos incluso mueren víctimas de tal perversión.
Sin poder comprender la depravación de algunos, comprendo, menos aún, cómo una madre puede recibir mierdas en su casa capaces de abusar de un ser indefenso, y esa zorra de madre, repito, no encuentro palabra más adecuada y tampoco quiero encontrarla, es capaz de vivir a expensas de ese dinero, sucio dinero, fruto de violación tras violación acaecida tras la puerta del cuarto de su hija; un cuarto que debe ser para una niña un cálido refugio, un lugar de juego, de estudio y de cuentos leídos y también narrados por la voz de una madre.
Le explicará a su hija, porque algo habrá de explicar, que nada es bueno o malo, que el bien y el mal es un invento engañoso de algunos sociólogos interesados y que podrán así comprar lo que no tienen sus compañeros de clase. De paso ella podrá adquirir el modelito que mola y podrá ir a la "pelu" que siempre está bien, para satisfacción de la niña, el ser la mami más vistosa del cole.

La situación puede ser precaria, la vida puede ser injusta, el dinero necesario para subsistir pero una mujer joven siempre puede trabajar y si tiene morro y desvergüenza para trazar semejante planteamiento de vida debe tener el mismo morro para salir a la calle y buscar un modus vivendi y, si lo desea, venderse a sí misma, es su problema, pero jamás, bajo ningún pretexto, ni ante ninguna situación, hay razón para poner en venta a su propia hija.
Miles de niños, insisto, son víctimas inocentes de la explotación sexual. No tenemos más que leer un periódico, escuchar la radio o, si acaso, ver algo la televisión. Son dramas que ocurren con demasiada frecuencia, diariamente, aquí o allá, y habrá otras muchas historias que jamás verán la luz, pero el daño está hecho y la víctima no se recuperará totalmente nunca. Aprenderá, eso sí, porque lo ha vivido, día a día, que no se puede confíar en nadie porque ni en su propia familia ha estado a salvo. Aprenderá también que el ser humano es igual que la mercancía, que tiene un precio y un dueño y, por tanto, en no pocas ocasiones, no digo en todas, de adulto reproducirá y/o tolerará los mismos modelos que de pequeño le han enseñado.

Otra forma de explotación sexual, no con fines económicos, pero igualmente horrendos, es el caso del incesto. También con frecuencia saltan a los medios de comunicación noticias de este tipo, bien porque la persona que lo ha sufrido, mayoritariamente mujeres, lo hace público después de haber convivido con el dolor, la rabia, la impotencia, la vergüenza, año tras año, o bien porque niños atendidos en hospitales muestran señales de tales abusos.
El niño es un ser independiente, un ser que no puede defenderse, un ser vulnerable a cuanto le rodea. Qué lamentable historia la de tantos niños que caen en manos de pederastas, de padres que los denigran, explotan y venden, de padres, que en definitiva, los valoran en función del placer y el dinero que les pueden proporcionar, de padres, que si llega al caso los torturan y los tiran a la basura.
No se puede concebir, no lo queremos oír, hiere la mínima dignidad y, sin embargo, es algo que existe y que, desgraciadamente, seguirá existiendo.
¿Qué se puede hacer? Poco, me imagino, pero si todos permanecemos atentos podemos detectar casos y si así es, denunciémoslo. Ese niño, o esa niña, es un ser que debe vivir dignamente. Pongámonos en su piel y hagamos un esfuerzo, no se necesita mucho, para identificar lo que siente y cómo será su vida.
Después de esto sabremos cómo debemos proceder.
El dinero y el placer mueven el mundo, no cabe duda, pero el dinero obtenido de algunas formas debiera quemar y el placer que buscan algunos, a costa de la vida de otros, debiera envenenar.
Pero lentamente.

"SIETE SACERDOTES ABUSARON DE MÍ HASTA QUE ME QUEDE EMBARAZADA"



Vivió cuatro años de abusos, pero se calló. Se sentía culpable. Rita Milla aguantó hasta que se quedó embarazada. Tuvo una niña de uno de ellos.

Pregunta. ¿Cómo empezó todo?

Respuesta. Los abusos empezaron cuando tenía 16 años. Vivía aquí, en California. Fue con un sacerdote que luego invitó a otros para que abusaran de mí también. Lo hicieron siete sacerdotes. No terminó hasta que yo tuve 20 años y quedé embarazada de uno de ellos. Para esconder lo que habían estado haciendo me mandaron a las Islas Filipinas para tener allí a mi niña, dejarla allá y regresar como si nada hubiera pasado.

P. ¿Recuperó a su hija?

R. Sí. Cuando llegué allí enfermé de gravedad. Tuve que quedarme allí. Vinieron mi madre y mi hermana. Cuando nació mi hija estaba a punto de morirme, pero al final la traje a EE UU.

P. Cuatro años de abusos es un largo tiempo. ¿Por qué no pudo salir de esa situación?

R. Yo era muy tontita, muy religiosa. Estaba como atrapada, como si no tuviera derecho de decir "no". Era como si yo no importara, como si sólo importaran los sacerdotes. A veces iba a confesión con otros sacerdotes y les contaba lo que pasaba, pero yo me sentía muy mal. Uno me dijo que era mi culpa, que así eran las mujeres.

P. ¿Lo hablabas con tus padres?

R. No. El sacerdote me hizo prometer que no se lo dijera a nadie. Una vez se lo dije a una profesora, ella se lo dijo a él y se enojó mucho. Me dijo que iba a echar a perder su vida si se enteraba la policía, que tendría muchos problemas. Me sentí mal, como si fuera mi culpa si algo le pasara a él.

P. Siete sacerdotes no es un caso aislado...

R. Ninguno dijo nada. Y había otros que no abusaron de mí pero sabían lo que estaba pasando y no dijeron nada. Después supe que unos estaba abusando de muchachos, de niños, y por eso no estaba interesado en mí. Cada uno hacía algo diferente, y unos se tapaban a otros.

P. ¿Cuándo decidió dar un paso adelante y contar su caso?

R. Yo quise hablar con los obispos para que lo que me ocurrió a mí no le ocurriese a nadie más.

P. ¿Y qué hicieron?

R. Nada. Eso fue lo que me asustó más. Los sacerdotes ya sabían que yo había hablado con los obispos, y les dijeron que no les importaba nada, como dándoles permiso para seguir.

P. ¿Sintió desesperación? ¿No pensó en ir a la policía?

R. Era un tiempo muy horrible. Yo quería suicidarme, estaba muy deprimida. Fui a una psicóloga y ella fue quien me dio la idea de buscar a un abogado para poner una demanda. Y fue entonces cuando la Iglesia empezó a actuar como si esto les importara.

P. ¿Cree usted que esto es un patrón de comportamiento en la Iglesia que todavía se repite?

R. Tengo miedo de que todavía se estén cubriendo unos a otros. Sólo les importó todo esto cuando se trataba de dinero, pero no cuando se trataba de niños. Ojalá que hayan aprendido que esto puede volver a pasar si no hacen algo para eliminar el problema.

P. ¿Está satisfecha con la resolución de este caso o le hubiera gustado que alguien fuera declarado responsable penal de lo ocurrido, quizá el cardenal Roger Mahony, que participó en ese encubrimiento?

R. Me gustaría que el cardenal Mahony estuviera en la cárcel porque lo que hacía era esconder a criminales.

NO ES PAÍS PARA NIÑAS


Fragmento de un artículo de Álvaro Bermejo, trantando el tema del abuso, los abusadores y el sistema judicial.


«En vez de reclamar cadenas perpetuas, pidamos de una vez tolerancia cero frente a todo tipo de maltrato infantil, que tiene en el abuso virtual y la explotación sexual dos de sus caras más flagrantes».
A finales del año pasado el llamado violador del Vall d'Hebrón salía de la cárcel tras haber cumplido 16 de los 311 años de su condena, de acuerdo con el Código Penal de 1973, que contemplaba el beneficio penitenciario de la redención de penas por trabajo. No obstante, más que esta notable rebaja penal, la confesión de que este violador reincidente salía de la cárcel sin estar rehabilitado suscitó un debate no sólo social, sino jurídico y médico. La calle era un clamor que pedía para él la cadena perpetua, con la misma fuerza que hoy denuncia la estrepitosa secuencia de despropósitos judiciales en torno al trágico asesinato de la niña de cinco años, Mari Luz Cortés.
En este caso ha fallado todo el sistema judicial español. Una caótica desconexión entre juzgados y Autonomías ha permitido que un psicópata que ya tenía dos condenas por abusos sexuales pendientes de cumplir, siguiera en libertad cinco años después de que cayera sobre él su primera sentencia. Como en el caso del Violador del Vall d'Hebrón, el linchamiento moral se ha bifurcado en dos vectores. Por una parte hacia el presunto asesino de Mari Luz, Santiago del Valle. Por otra, hacia la propia Administración de Justicia, cuya incompetencia también carga con su cuota de responsabilidad ante la muerte de esta pequeña que, de haberse cumplido la ley, se hubiera podido evitar sin necesidad de recurrir a ninguna cadena perpetua.


Artículo de opinión publicado en http://www.diariovasco.com/ por ÁLVARO BERMEJO

¿ABUSADOR O ABUSADORA?

El 80% de los abusos sexuales a niños y el 95% de los que sufren las niñas son realizados por hombres. Entonces, ¿qué ha ocurrido con el resto?¿quién lleva a cabo el resto de los maltratos?

Pese a todos los tabús sociales al respecto, las mujeres también abusan sexualmente de los menores. Además, en el caso de los maltratos físicos, ellas los aplican tanto como ellos, si no más (las estadísticas dicen que en el 51% de los casos son mujeres).

Cuando ambas cosas se combinan, el resultado es potencialmente explosivo y casi siempre indetectable debido a los roles y presunciones tradicionales.

LA NIÑA (Aventura)


LETRA DE UNA DE LAS CANCIONES DEL GRUPO AVENTURA, QUE TRATA EL TEMA DEL ABUSO DE MENORES, Y HEMOS PENSADO QUE SERÍA INTERESANTE QUE LA VIÉRAIS.


La niña duerme tan profundo solo un fuego o un disparo la puede despertar
Tan inocente apenas tiene 9 años y mañana quizás no entenderá
Que un extraño en su cama toco su cuerpecito con malicia y sin piedad
Ella no entiende que hay personas en la vida
que se animan solo para hacer maldad

[Coro]
¿Y quien diablos fue?
Un desgraciado sin corazón
¿Díganme como entro?
Quizás olvidaron cerrar la puerta
Solo saben que hizo el daño y se marcho

El día siguiente un oficial le preguntaba a sus padres como fue que sucedió
La madre sufre y el padre pensativo no habían huellas de aquel que la violo
La niña llora se imagina que ayer mientras dormía algo malo le paso
Mas ver sangrero en su ropa el policias en su cuarto y un poquito de dolor

[Coro]
¿Y quien diablos fue?
Un desgraciado sin corazón
¿Díganme como entro?
Quizás olvidaron cerrar la puerta
Solo saben que hizo el daño y se marcho

Como es posible que alguien pueda hacer daño a un angelito de dios
La niña solo tenia 9 años y un malvado la violo
Aquí les traigo otra historia a la gente y esta no es de amor
Es un mensaje, es un anectoda triste que hoy convierto en cancion

This is what you like

Its your favorite group baby

You know

Alex, your daddy loves you

Llora guitarra como llora esa nina

[Coro]
¿Y quien diablos fue?
Un desgraciado sin corazón
¿Díganme como entro?
Quizás olvidaron cerrar la puerta
Solo saben que hizo el daño y se marcho

Como es posible que alguien pueda hacer daño a un angelito de dios
La niña solo tenia 9 años y un malvado la violo
Aquí les traigo otra historia a la gente y esta no es de amor
Es un mensaje, es un anectoda triste que hoy convierto en cancion

Pasaron meses y la niña con su trauma se le hace difícil dormir
No se divierte y sus muñecas tienen polvo, ya no juega nadie la ve reír
Y otra noche de martirio, pesadillas del pasado que la hacen sufrir
Ya son las 3 de la mañana y la niña en llanto se duerme por fin

Y volvió
El mismo desgraciado sin corazón
Pero como de nuevo entro
No se imaginan como lo hizo
Nunca hubo una puerta abierta
Y esta vez la niña despertó

¿Papi que tu haces?